El
palmar de Ocoa se encuentra aproximadamente a una hora y 15 minutos de la
ciudad de Santo Domingo, puedo decir que
este lugar he creado uno de los más bellos recuerdos con mis amigos de
mi vida hasta ahora. Este lugar tiene una magia que no se puede explicar ni escribir,
es preciso estar allí y sentirlo.
Es
un lugar que nos abre todos los sentidos y nos hace olvidarnos de todo
excepto de la felicidad de estar vivos.
Mi
forma favorita para llegar al Palmar de Ocoa es casi en la misma forma cómo
llegamos a la dunas de Bani (ver como llegar) luego de pasar el pueblo de Matanzas y
las Calderas, veremos la entrada a mano derecha. Esta calle es una sola, solo debemos seguirla
y disfrutar de su hermoso paisaje montañoso y árido que nos conducirá a
nuestros destino.
La
arena en el Palmar de Ocoa sigue siendo oscura como esta zona del sur, pero
esto no opaca la transparencia y limpieza de sus aguas, sin ningún esfuerzo
podemos ver claramente el fondo del mar y disfrutar de unas aguas
caribeñas diáfanas y cálidas. No va a haber ningún problema para la comida ya
que la misma playa tiene varias cacetas donde se pueden comprar pescado frito y
otros alimentos marinos y en el pueblo también hay diferentes opciones gastronómicas. Lo
mejor, las puestas de sol, el ambiente puro y relajado y la sensación de paz y libertad que nos produce este
lugar.
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